Según la (Organización Mundial Para La Salud) OMS, la hipertensión, o lo que comúnmente se conoce como tensión arterial alta o presión alta, es una alteración de los vasos sanguíneos que afecta directamente a tu corazón. Cuando la tensión sube, la sangre es bombeada con mucha presión y golpea las arterias con mucha fuerza.
La hipertensión es un problema de salud bastante serio y si no llega a ser controlada puede causar infartos, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal, ceguera y deterioro cognitivo. Es por ello, que si te han diagnosticado tensión alta, debes saber que es muy importante que tomes medidas de acción que cambien tu estilo de vida.
Lo que debes hacer para bajar tu tensión arterial
- Sigue una dieta rica en frutas y vegetales frescos. Sobre todo consume todos aquellos vegetales que sean verdes, estos contienen ácido fólico y esto ayuda a bajar la tensión.
- Realiza actividades físicas. ¿Sabías que practicar ejercicio puede reducir un 70% el riesgo de hipertensión. ¡Sí! Por eso, además de la dieta, realizar alguna actividad física todos los días de la semana es importante. Si no eres de las personas deportistas, trata de caminar, ir en bicicleta, o – en el mejor de los casos- correr durante 20 a 30 minutos al día de forma habitual.
- Duerme bien. Cuando duermes, tu presión baja ya que tu corazón se relaja. Hay investigaciones que muestran que el riesgo de hipertensión puede aumentar en un 37% si se duerme una hora menos de lo que se debería, durante cinco años seguidos.
- Si estás bajo tratamiento médico o con medicación, debes cumplir al pie de la letra las instrucciones que tu médico de cabecera te dio. No puedes olvidarte tomar tu medicación o hacerlo a deshoras.
Lo que debes evitar para que no suba tu tensión arterial
- Evita la sal o reduce tu consumo a 2 gramos de sodio al día. Es necesario tener una dieta baja en sodio, por lo que debes intentar reducir tu consumo de sal.
- Evita las grasas saturadas y el colesterol. Debes dejar de comer frituras, salsas, dulces, chocolates, mantecas o mantequillas, entre otros.
- Evita el estrés o al menos trata de reducirlo mediante técnicas de relajación, respiración pausada o escuchando música relajante.
- Evitar fumar. Debes dejar el tabaco lo antes posible y así mismo evita los círculos sociales de fumadores o espacios con humo.
- Evita beber alcohol.
- Evita automedícarte.
- Evita o limita el consumo de cafeína.
- Evita consumir productos con alto contenido en azúcar. Como por ejemplo la Coca Cola. En general debes reducir el consumo de azúcar, sobre todo los zumos o refrescos procesados, ya que contienen sirope de maíz (fructosa) que aumenta el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares.